jueves, 30 de noviembre de 2017

Demasiado lento

Desde que compré la Ktm le he estado dando un poco de cariño (mecánicamente hablando), la moto estaba bien, pero ha estado mucho tiempo sin darle un uso continuado y eso provoca pequeños desfases en su mantenimiento.
Ha sido limpieza de filtro, cambios de aceite, pastillas, líquidos, etc, quedaba pendiente dos cositas que no suponían ningún problema para rodar, pero que debo hacerlas, una de ellas era más preocupante y es que tenía un problema en la palanca de freno trasero, estaba gripada, se había solucionado poniendo una tuerca con freno y una arandela plástica entre la palanca y el chasis, pero tenía problemas para retornar a su posición de descanso y eso puede provocar sin darte cuenta un desgaste prematuro de las pastillas o peor, cargarte el disco.

Después de un rato batallando con el rodamiento interno, las arandelas, etc, conseguí sacar el tornillo que se había quedado soldado al interior del rodamiento por usar fijador de tornillos en exceso y por suciedad acumulada, tras la limpieza, montaje y sustitución de la arandela de plástico por una metálica la palanca va suave y sin problemas de retorno.

También monté la bandeja trasera más pequeña y sustituí un par de tornillos que estaban algo doblados y con hilos comidos, ahora todo está repasado, engrasado y para un largo periodo sin tocar.

Por último me quedan por cambiar el aislante térmico de los depósitos de gasolina, montar las palomillas secundarias de la inyección y cambiar los filtros de la bomba de combustible, pero a ver si consigo un poco de tiempo libre para hacerlo, con esto mecánicamente creo que dejaría la moto en perfecto estado de revista.

lunes, 6 de noviembre de 2017

Ruta hacia la Alcolea

Ayer domingo se presentaba un día de esos que puedes disfrutar bastante bien en el campo, las lluvias durante la semana han mojado por fin el campo y los caminos ya no se convierten en grandes polvaredas a tu paso. Lo justo, algunas zonas con algo de barro en zonas sombrías, pero poco más.

El plan era ir por carretera hasta Sanlucar la Mayor, osea, 145 km de distancia desde mi casa, ya lo tengo calculado y suelo tardar una hora entre salir de mi casa, repostar y llegar al sitio de salida, pero ayer, la mañana se torció un poco al principio.

Tener niños pequeños te condiciona todo lo demás, y los mios tuvieron la genial idea de levantarse ayer especialmente temprano, así que tuve que ponerles un mini desayuno e intentar que durmieran otra vez, en el caso de la niña lo conseguí, pero mi chaval se negaba y finalmente tuve que dejarlo por imposible.

Entre unas cosas y otras, salía de casa casi a las 8:30 de la mañana, imposible llegar al sitio de quedada en hora, así que mientras me vestía de romano, buscaba guantes, rodilleras, blusa y pantalones el tiempo me venció.
Llegando a Trigueros decido cambiar el plan y rodar dirección a la Alcolea por campo y al menos no perder casi una hora de tiempo en llegar a Sanlucar, con esto seguro que no llegaría a tiempo al puente, en fin, adaptarse a las circunstancias.

Al llegar al río una bruma mañanera hacía bajar la temperatura varios grados y dejaba una estampa bastante bonita, no tuve más opción que parar y tomar varias imágenes.

A partir de ahí, ritmo alegre hasta llegar a Calañas donde quería desayunar tranquilo, durante el camino varios animales se cruzaron a mi paso, algunos saltando sobre el terreno con una facilidad pasmosa. Paro de nuevo para algunas fotografías.



Aquí puedes parar a ver la mina de Los Milanos, con varias de sus instalaciones casi a punto de caerse por su abandono.

A partir de ahí, el sol siguió subiendo y el calor empezó a apretar, por lo que enfilé el track hasta el puente de la Alcolea donde llegué sobre las 12:30 horas bajo un sol que empezaba a picar y que hacía que el ventilador de la moto arrancase cada pocos kilómetros, por lo estrecho y enrevesado del camino, me obligaba esto a ir en 1ª en muchos puntos.

Después de aquello enfilé el camino de vuelta con la firme intención de ir familiarizandome con la Ktm, y que pronto me dejó algunas cosas muy claras. Lo primero es que la moto corre, pero corre mucho, quizás demasiado para según que zonas y el problema es que en 2ª y en 3ª en un buen régimen del motor ya empiezas a acercarte a los 80 km/h y sin apurar, es una sensación que ya conozco de la BMW, pero con esta se acentua más ya que el motor es mucho más aprovechable, estira muchísimo más. Esto en sí no es malo, pero cuando tienes que frenar la historia se complica, en un par de ocasiones te ves frenando con todo y diciendo por dentro ay ay ay ay. 
Esta moto frena, pero no tanto como la BMW, después de sangrar el circuito ha mejorado mucho, pero aun así, me sigue faltando frenada. Aquí me dí cuenta de un detalle curioso y es que esta moto tiene ABS al igual que la BMW, pero no funciona igual, en la 800 frenabas y notabas enseguida el trabajo del ABS, la maneta y la palanca trasera empezaban a temblar y la moto no bloqueaba nunca, por esa razón en campo era muy intrusivo, pero en carretera daba mucha seguridad. En la KTM la moto bloquea mucho más, deja que la rueda ruede y vuelve a bloquear, osea, sin desconectar el ABS, la KTM permite bloquear la rueda trasera en algunas ocasiones.
Por último controlé el consumo de combustible, ya que la moto no trae indicador de nivel, solamente testigo de reserva, los datos son: 285 km en carretera y 235 km en campo, en la BMW conseguía 290 km en carretera y 270 en campo, en este aspecto sale ganando la BMW que con 16 litros conseguía muchos más kilómetros.