Moto nueva, vida nueva

Me acuerdo ahora de una mañana en Villablanca, al poco tiempo de comprar yo mi Honda Dominator, que después de un pequeño tramo entre los pinares de Cartaya, paramos a desayunar.
Fue en Octubre de 2012.

En esta foto comentaba con Maqui, Antuan e Isidoro que no aparece por estar sacando la foto, qué tipo de motos nos gustaban y cuales nos podría ir bien a cada uno de nosotros, por aquellas fechas, todo el mundo me decía que mi moto ideal, debido a mi altura y uso era o bien una KTM 990 adventure, 950 Super enduro o bien la BMW F800gs.

Después de unos años de uso de la Dominator, por fin empecé a buscar moto sustituta y debido a los precios de las KTMs y que yo tenía que liquidar un select con BMW, finalmente aterrizó en mi garaje la que ha sido mi moto hasta hace pocos días.

Me quedé sin moto el pasado día 14 de septiembre y en estas semanas me he dedicado a mirar motos y probarlas, he probado la 690 enduro R, en configuración de carretera, ya que la persona que me la prestó la tiene con un kit supermotard durante el verano.

La primera impresión es que la moto es alta, muy delgada y me falta moto por todos lados, el motor, es potente y bastante lleno, vibra bastante a 120 en carretera, lo que impide ver algo por los espejos retrovisores y por último, se muestra muy estable en carretera y caminos sencillos. En la prueba no pude hacer mucho campo, ya que los neumáticos no me lo aconsejaban, pero el poco trozo que hice, me gustó, para mí es una bicicleta, muy fácil de llevar.

La siguiente moto que probé fué precisamente la 990 Adventure de Maqui, que la tiene en venta y que actualmente tiene montadas las suspensiones de la versión S, lo que sube el asiento de la moto bastante y me hace llegar un tanto inseguro al suelo, la primera vez que me pasa esto con una moto.

Debido a que la suspensión estaba tarada en modo racing, la moto se muestra bastante dura en su primera impresión, pero luego puedes comprobar que con los baches se comporta muy bien, hice varios caminos de tierra ya que tenía ruedas de tacos montadas y realmente la moto vá muy bien, me sentí "como en casa", es el mismo concepto de donde vengo, pero con prestaciones más deportivas.

La moto empuja una barbaridad y se levanta a la mínima insinuación. La moto necesita un pequeño lavado de cara, ya que tiene roces, suciedad y detalles algo feos después del uso en campo, los años y los días que lleva parada en un garaje (casi año y medio).

Finalmente me quedo con la 990 Adventure, tengo que adaptarla a mí, poner las suspensiones más blandas, menos radicales, ajustar los mandos, el manillar y finalmente la pienso desmontar, vinilar y adecentar a mi gusto, ya que soy bastante mijita con mis motos y me gusta verlas bien, quizás tenga que cambiar alguna tornilleria que aparece con algo de oxido por falta de uso, en fin, que espero que me dé las mismas satisfacciones que la BMW me dió hasta ahora.